Leonardo Castellani: El Apokalypsis de San Juan. Prólogo de Juan Manuel de Prada. Homo Legens, Madrid, 2010, 405 pgs.
Cabía esperarlo. Porque el autor es inteligente, brillante, rompedor y hasta tocanarices. Juan Manuel de Prada se ha empeñado en dar a conocer a Castellani a los españoles y lo está logrando con algunos. Que sin duda se lo agradecerán. Primero con una colección de artículos del sacerdote argentino, que ya comenté en el Blog con todo elogio, y ahora con la obra más comprometida de Castellani. A ambos libros dedicó dos inteligentes prólogos. De más difícil acceso es otro libro imprescindible para conocer a Castellani, la biografía que en Argentina publicó Sebastián Randle. Aunque tiene un gran defecto pese a su gran número de páginas., Concluye con la salida de Castellani de la Compañía de Jesús. Con lo que queda buena parte de la vida del ya exjesuita por conocer. Y fue tan apasionante, o más, que la de los años biografiados..
El Apocalipsis es un libro que calificarlo de difícil es quedarse muy corto. Yo sólo tuve dos encuentros con él. El primero cuando debía tener quince o dieciséis años y un jesuita de mi colegio me instó a leer el Nuevo Testamento. Los Evangelios, que sustancialmente ya conocía, los leí sin el menor problema. Y los Hechos, de los que sabía menos. Las Epístolas fueron una revelación y desde entonces quedé cautivado por San Pablo. Y llegué al Apocalipsis. Que fui incapaz de terminar. En realidad, de casi comenzar. No entendí nada. Y decidí no perder más el tiempo en tal lectura. No debí comentarlo con el padre que me recomendó el Nuevo Testamento porque no tengo recuerdo de ninguna observación suya al respecto.
Y en mi abandono del Apocalipsis pasaron más de 50 años. Sin que se me ocurriera volver a intentar leerlo. Ahora acabo de hacerlo con Castellani, según Castellani, y me ha parecido un libro deslumbrante. Una profecía de fe y de esperanza en la segunda venida de Cristo en gloria y majestad. No es un libro de temores, como tantos han dicho, sino de esperanza cristiana y de propósito de llegar a ese día llevando el nombre del Cordero sobre la frente, escritos en el libro de la vida del Cordero. Serán tiempos durísimos pero los que permanezcan fieles tienen la Palabra de Dios.
“Y dijo el sentado en el Trono
(Sigo la versión de Castellani, la de Nácar-Colunga, en su 6ª edición, que es la que manejo, la hallará quien quiera en la pg. 1535, y la de Alonso Schökel en la 447 del NT)
“Yo lo hago nuevo todo”-
Y díjome: “Escribe
Pues estas palabras fieles son y VERACES”-
Y díjome: “Ya está-
Yo soy la A y la Z,
El Principio y el Fin-
Al sediento yo le daré de la fuente
Del agua de la Vida
Regalada gratis-
El que venza poseerá todo esto
Y yo le seré Dios
Y él será hijo mío-
Mas los cobardes y los incrédulos
Y los asquerosos, los asesinos, los fornicarios
Y los hechiceros y los idólatras
Y todos los que mienten-
La herencia dellos
En el lago ardiendo
En fuego y azufre,
Lo cual es la Muerte Segunda””.
No voy a decir que después de Castellani todo el Apocalipsis queda meridiano porque él mismo dice que hay pasajes que no sabe cómo interpretar. Y tampoco sostengo que la versión del sacerdote argentino es la canónica. Que tampoco la hay. Las profecías no son meridianas hasta que se cumplen y éste es un libro profético. Muchos autores han dado su interpretación del texto joanneo. Castellani recoge unas, rechaza otras, da la suya… Y la que da es brillante, apasionante, católica. Confirma en la fe y en la esperanza. Llegará un día en el que el Apocalipsis será un libro inútil porque ya se habrá cumplido y los hombres estarán gozando de Dios o en el fuego y en el azufre. Cuando ya no habrá profecías. Se habrán cumplido.
Estamos ante un libro de absorbente lectura, ante una llave que abre el Apocalipsis, o lo abre de algún modo. Y en mi opinión desde la más absoluta ortodoxia. Aunque la fe no imponga seguir la interpretación de Castellani en todos sus puntos. ¿Hay reliquias de milenarismo en su versión? Ciertamente. Pero entiendo que en un sentido totalmente católico.
Me ha parecido un texto apasionante que recomiendo vivamente a todos mis lectores que tengan un mínimo de formación religiosa y cultural. El que no llegue a esos mínimos, que se abstenga. Y también del Apocalipsis. Porque no entenderá nada.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario